CADENA DE SUMINISTRO Y ADMINISTRACIÓN DE LA CADENA DE SUMINISTRO
En el sofisticado mercado actual, gran número de empresas se enfoca en su cadena de suministro y recurre a la administración de esta última para tener una ventaja competitiva.
La cadena de suministro de una empresa incluye a todas las empresas que participan en todos los flujos ascendentes y descendentes de los productos, servicios, finanzas e información, de los proveedores iniciales (el punto de origen) al cliente final (el punto de consumo).
La meta de la administración de la cadena de suministro es coordinar e integrar las actividades que desempeñan los miembros de la cadena de suministro en un conjunto de procesos homogéneos finales y, por último, permitir una “total visibilidad” a los gerentes de la cadena de suministro, tanto dentro como fuera de la empresa.
La filosofía detrás de la cadena de suministro es que al visualizarla completa, los gerentes pueden maximizar los puntos fuertes y las eficiencias en cada nivel del proceso para crear un sistema de suministro altamente competitivo y orientado al cliente, el cual es capaz de responder de inmediato a los cambios en la oferta y la demanda.
Las empresas que se orientan a la cadena de suministro son las que reconocen y adoptan esta filosofía y, por tanto, ven las repercusiones de la administración de los flujos de productos, servicios, etc., entre los proveedores directos e indirectos y los clientes. Un importante elemento de la administración de la cadena de suministro es que está orientada por completo al cliente.
En la actualidad, la administración de la cadena de suministro tiene una doble función: primero, como comunicador de la demanda del cliente que abarca desde el punto de ventas todo el camino hasta regresar al proveedor, y segundo, como un proceso de flujo físico que realiza la ingeniería del movimiento oportuno y eficaz de los costos de productos a lo largo del conducto de suministro completo desde el origen hasta el consumidor.
Los gerentes de la cadena de suministro son responsables de la toma de decisiones estratégica, como la coordinación de las fuentes y la compra de materia prima, programación de la producción, procesamiento de pedidos, administración del inventario, transporte y almacenamiento de suministros y productos terminados, manejo de devoluciones y coordinación de las actividades de servicio al cliente.
Dichos gerentes son también responsables de la administración de la información que fluye a lo largo de la cadena de suministro. Coordinar las relaciones entre la empresa y sus socios externos, como vendedores, transportistas y empresas que son terceras partes, también es una función crucial de la administración de la cadena de suministro.
Ya que los gerentes de la cadena de suministro desempeñan una función tan importante tanto en control de costos como en la satisfacción de los clientes, son más valiosos que nunca. En resumen, los gerentes de la cadena de suministro son responsables de dirigir la materia prima y las refacciones al departamento de producción y el producto terminado o semiterminado mediante almacenes y, por último, al intermediario o al usuario final.
La administración de la cadena de suministro, sobre todo, comienza y termina con el cliente. En lugar de imponer un producto en el mercado, que pueda o no venderse con rapidez, los gerentes de la cadena de suministro reaccionan a la demanda real de los clientes. Al hacerlo, minimizan el flujo de la materia prima, el producto terminado y el empaque de materiales en cada punto en la cadena de suministro, lo que resulta en costos más bajos y mayor valor para el cliente.
INTEGRACIÓN DE LA CADENA DE SUMINISTRO
Un principio clave de la administración de la cadena de suministro es que múltiples empresas trabajan juntas para realizar tareas como un solo sistema, unificado, más que como varias empresas individuales que actúan aisladas.
Las empresas en una cadena de suministro de clase mundial combinan sus recursos, habilidades e innovaciones, de tal forma que se usan para el mejor interés de la cadena completa como un todo, y tienen como objetivo que el desempeño general de la cadena de suministro sea mayor que la suma de sus partes.
Conforme las empresas se vuelven cada vez más orientadas a la cadena de suministro, desarrollan prácticas de administración que son consistentes con este enfoque de sistemas.
Se dice que las prácticas de administración que reflejan un esfuerzo altamente coordinado entre los socios de la cadena de suministro son “integradas”. En otras palabras, la integración de la cadena de suministro ocurre cuando múltiples empresas coordinan sus actividades y procesos para que estén fusionadas entre sí de forma homogénea en un esfuerzo por satisfacer al cliente.
En una cadena de suministro de clase mundial, el cliente puede no saber dónde terminan las actividades de negocios de una empresa o unidad de negocios y dónde empiezan los de otra; todas las empresas y unidades de negocio participantes parecen leer el mismo guión.
En la práctica de la administración de una cadena de suministro de clase mundial, se buscan seis tipos de integración por parte de las empresas interesadas en proporcionar un servicio de primer nivel al cliente. En términos de interacciones sociales de empresa a empresa, la integración relacional proporciona importantes beneficios.
Para fines de planeación y control operativos, se ha demostrado que la integración de la medición, la integración de tecnología y la planeación son factores determinantes del éxito de la empresa y de la cadena de suministro en general. Al ejecutar las operaciones diarias, otros tres tipos de integración son dignos de consideración: integración del proveedor de materiales y servicios, integración de operaciones internas e integración del cliente.
Integración relacional
La integración relacional es la capacidad de que dos o más empresas desarrollen conexiones sociales que sirvan para guiar sus interacciones cuando trabajen juntas. De forma más específica, la integración relacional es la capacidad para desarrollar y mantener un marco mental compartido entre empresas, el cual describe la forma en que dependerán entre sí cuando trabajen juntas.
Esto incluye las formas en las que colaborarán en actividades o proyectos para que el cliente obtenga la máxima cantidad de valor total posible de la cadena de suministro. Cuando múltiples empresas en una cadena de suministro han alcanzado una gran integración relacional, han desarrollado ciertas características sociales que permiten que la cadena de suministro completa se desempeñe a un nivel más alto del que sería posible para cualquiera de los socios que operan solos.
Por ejemplo, las cadenas de suministro integradas de forma relacional, por lo general, tienen una especificidad del rol; es decir, cada empresa en la cadena de suministro tiene claridad en términos de saber cuál empresa es líder, cuáles empresas son las seguidoras y qué responsabilidades se asignan a cada empresa.
Las cadenas de suministro integradas de forma relacional también tienden a ser administradas por lineamientos sociales formales o informales, un conjunto de reglas, políticas y/o procedimientos que dictan la forma en que las empresas trabajarán juntas y especifican cómo se resolverán los conflictos entre los socios de la cadena de suministro.
Integración de la medición
En un nivel algo más tangible, las empresas en las cadenas de suministro integradas llegan por lo general a un consenso en cuanto a la forma en que cada empresa participante y la propia cadena de suministro medirá sus fracasos y éxitos.
La integración de la medición refleja la idea de que las evaluaciones del desempeño deben ser transparentes y mensurables a través de las fronteras de las diferentes unidades de negocio y empresas, y también evaluar el desempeño de la cadena de suministro como un todo, aun cuando cada empresa o unidad de negocios es responsable del logro de sus objetivos.
Aunque alcanzar una integración de la medición puede parecer simple, en realidad representa un conjunto de tareas muy complejo. Los miembros de la cadena de suministro, aunque están conectados provienen, por lo general, de una diversidad de industrias y desempeñan roles muy diferentes en la cadena de suministro; los estándares de desempeño y las mediciones de éste pueden variar en gran medida entre las industrias.
Se han identificado diversas áreas de capacidad que son útiles para generar una integración de la medición a través de la cadena de suministro.
Integración de tecnología y planeación
La administración de una cadena de suministro de clase mundial depende de la adquisición y el uso de información completa, precisa y oportuna. Si los gerentes de la cadena de suministro no conocen los hechos acerca de su entorno de negocios, no pueden tomar buenas decisiones sobre de qué hacer ahora o en el futuro.
Al alcanzar una integración de tecnología y planeación a través de sus cadenas de suministro, las empresas pueden obtener la información necesaria para hacer una planeación a corto y a largo plazo y, así, tomar mejores decisiones operativas.
La integración de tecnología y planeación se refiere a la creación y el mantenimiento de los sistemas de tecnología de información que conectan a los gerentes entre las empresas en la cadena de suministro. Requiere sistemas de información de hardware y software que puedan intercambiar datos, cuando sea necesario, entre clientes, proveedores y áreas operativas internas de cada uno de los socios de la cadena de suministro.
Se deben desarrollar algunas capacidades, a nivel de la empresa y de la cadena de suministro, con el fin de que la integración de tecnología y planeación sea una realidad.
Primero, las empresas en la cadena de suministro deben convertirse en expertas en la administración de información; debe haber flujos de datos homogéneos y relacionados con los clientes, niveles de inventario, embarques, etc., entre todos los miembros pertinentes de la cadena de suministro.
Deben estar disponibles en tiempo real paquetes de información y tener acceso a ellos siempre que se requieran y donde se necesiten con el fin de mejorar la experiencia del cliente.
Además, los gerentes de la cadena de suministro dentro de las empresas y unidades de negocio deben tener sólidas capacidades internas de comunicaciones, lo cual significa que la información no quede atrapada en silos, sino que se difunda donde se requiera a lo largo de la empresa.
En forma similar, los gerentes deben estar conectados con los de otras empresas por medio de algún tipo de conectividad externa, de tal forma que puedan compartir y analizar la información necesaria y consultarla en un formato oportuno, sensato y utilizable.
Integración del proveedor de materiales y servicios
La popularización de los sistemas de retiro basados en la demanda, durante los últimos siete años, ha urgido a las empresas a reconsiderar los procesos que utilizan al atender a los clientes. Para operar los sistemas de retiro de forma eficiente, es necesario adquirir los materiales que se usan en la producción tanto de forma barata como eficaz.
Como resultado, otro tipo de integración, integración del proveedor de materiales y servicios (en ocasiones llamada simplemente integración del proveedor) se ha vuelto un enfoque clave en la cadena de suministro.
Cuando primero se considera la integración de los proveedores, parece simple: las empresas deben vincular de forma homogénea a las personas externas que proporcionan productos y servicios para ellos, para agilizar los procesos de trabajo y así brindar experiencias tranquilas y de alta calidad a los clientes.
Las empresas que han desarrollado altos niveles de integración de proveedores, muestran por lo general una significativa alineación estratégica entre ellos y sus proveedores de materiales y servicios. Esto significa que ambas partes tienen una visión común del proceso de creación de valor total y cada una está dispuesta a compartir la responsabilidad para satisfacer los requerimientos de los clientes.
Integración de operaciones internas
Para proporcionar una experiencia homogénea y satisfactoria a los clientes, todos los que trabajan dentro de una empresa deben “estar en el mismo canal” en términos de las operaciones cotidianas.
Un desafío fundamental que experimenta la mayoría de las empresas es la necesidad de integrar diversos departamentos dentro de la empresa, como marketing, investigación, ventas y logística, todo lo cual ayuda a crear y entregar una oferta de valor agregado a los clientes.
Si todas las áreas organizacionales no funcionan bien juntas, el cliente podría pasar por una experiencia donde reciba diferentes respuestas a la misma pregunta según la persona a quien llame, o se podría entregar un producto o servicio que no es exactamente lo que se pidió o lo que se necesitaba.
La excelencia del proceso dentro de la empresa requiere que las operaciones internas estén más integradas. La integración de las operaciones internas es el resultado del desarrollo de las capacidades para vincular de forma interna el trabajo desempeñado en un proceso homogéneo que inicia desde las fronteras departamentales o funcionales, con la meta de satisfacer los requerimientos de los clientes.
Integración del cliente
La integración del cliente es una competencia que permite que las empresas ofrezcan productos o servicios duraderos, distintivos y de valor agregado a los clientes que representan el mayor valor para la empresa o para la cadena de suministro.
La integración del cliente requiere que las empresas de la cadena de suministro conozcan mucho sobre sí mismas y su base de clientes potenciales.
Las empresas con alta integración del cliente evalúan sus propias capacidades y luego las compaginan con las de los clientes cuyos deseos pueden satisfacer y quienes ofrecen un potencial de ventas suficientemente grande para que el vínculo sea rentable a largo plazo.
Como fue el caso con otras bases de integración, la integración del cliente implica que diversos impulsores estén presentes para un éxito general. Primero, las empresas deben entender que no todos los clientes son iguales y deben utilizar la segmentación de mercados para descubrir cuáles de los probables clientes estarían más satisfechos por las competencias centrales de la cadena de suministro.
Esta segmentación se debe basar en las necesidades actuales expresadas por el cliente y cualquier requerimiento futuro probable que aún tenga que ser expresado. Una vez que el conjunto de clientes se ha segmentado con base en el grado al cual la cadena de suministro los puede atender, las empresas deben elegir grupos de clientes a los cuales proporcionar los niveles de servicio más altos.
Este proceso se conoce como segmentación ABC; clientes que se colocan en grupos A, B, y C con base en su valor general a largo plazo para la empresa y con el grado en el cual ésta puede atender sus deseos. Con base en la segmentación ABC, se establecen niveles de integración del cliente.